Fase II: Una Expansión de la Iniciativa para el Matrimonio
La primera fase de la Iniciativa se ha centrado principalmente en proporcionar un nuevo marco para ampliar la visión de la preparación del matrimonio en nuestra diócesis. El objetivo principal de esta fase fue el crear conciencia sobre la importancia de la vocación del matrimonio y para ofrecer una nueva visión; para ayudarnos a crear una cul-tura en que la educación para el matrimonio es vista como parte integral de las vidas de las personas para convertirse en la Iglesia doméstica.
La segunda fase de la Iniciativa para el Matrimonio diocesano se lanzó en la primavera del 2012. Un aspecto impor-tante de esta fase es el enfocarnos en promover matrimonios sanos y llenos de Fe. Para lograr esto, vamos a:
Continuar aplicando las metas y los objetivos de la propuesta inicial aprobada por el Obispo Barnes en diciembre del 2009.
Ofrecer celebraciones y eventos para matrimonios, para mejorar y promover la Iniciativa Diocesana para el Matrimonio.
Iniciar un mes dedicado a ”Concientizarnos acerca del matrimonio" en espera que esto se repita cada año.
Publicar una revista dos veces al año dedicada a la vocación matrimonial.
Promover un modelo Diocesano y parroquial que Fortalece-Matrimonios.
Promover un modelo Diocesano y parroquial de apoyo para equipos que fortalece matrimonios.
Ofrecer el curso de especialización para el sacramento del matrimonio y entrenamiento de habilidades de comunicación a un costo bajo.
Ampliar la preparación sacramental esta-blecida (bautismo, reconciliación, primera comunión, confirmación y matrimonio) para incluir como parte de esta preparación para padres apropiada por la edad y habilidades de comunicación; para ayudar a construir una base sólida que produzca matrimonios y familias sanas y llenas de fe.
Esta promesa de convertirse en una Iglesia que Fortalece Matrimonios, exige una colaboración comprensiva para el ministerio matrimonial que…
Proclame y de testimonio a la plenitud de la revelación de Dios sobre el significado y misterio del matrimonio
Acompañe y asista a personas en todas las etapas de su vida: desde los primeros años cuando los jóvenes comienzan a aprender acerca de las relaciones comprometidas hasta los últimos años de casados e incluso más allá de la pérdida de un cón-yuge.
Invita e incluye los dones de muchos, comenzando con las parejas casadas y acogiendo también el servicio y testimonio ofrecido por ministros ordenados y por mujeres y hombres en la vida consagrada.
Alienta y utiliza muchos métodos y enfoques para atender a personas y parejas cuyas circunstancias en la vida muestran necesidad y cuya preparación y disposición para recibir el ministerio de la Igle-sia puede variar ampliamente
Celebra e incorpora la diversidad de razas, culturas, etnias y patrimonios con las que Dios enriquece a la Iglesia, especialmente en nuestra nación y el mundo.